Crónica MARATON SIERRA NORTE 17 de Octubre de 2010

Grupo SOLIDARIO HACIA EL CANCER DE MAMA participando en la MARATÓN.



Pakeras, Peter y Karlos. Final





Pakeras, y sus nudos "marineros" en la cadena.

Parecíamos en momentos determinados una procesión...el comienzo fue insufrible


Muchos frutos secos en los avituallamientos, ¡¡¡la cantidad de higos que comimos!!!

Karlos "al rico melón".

Peter devorando en un avituallamiento...mucha frutita.


Vaya bajadita...


Estirando...

A la altura de "La Cabrera"

Buenas Sres;

Y llegó el gran día, el día esperado, donde ibamos a participar por primera vez en una edición de la MARATÓN SIERRA NORTE DE MADRID 2010.
Para tal ocasión, nos apuntamos Peter, Pakeras y un servidor, sabiendo por el perfil de la ruta no iba a ser un camino de rosas precisamente.
Sobre las 8.15 nos encontramos en "El Berrueco" (Madrid), con una temperatura que rozaría los 2-3 grados, osea, un fresquito que hacía abrigarnos convenientemente para retirar nuestro dorsal.
Después de saludar a varios amigos entre los que se encontraban nuestros amigos "cerveceros" JuanFRan, Alfredo y Jorge, nos dispusimos a preparar nuestras máquinas, a colocar nuestro dorsal y a coger el aprovisionamiento para esos 80 kilómetros que nos esperaban.
No sé si por despiste ó porque en realidad ni miramos la hora,el caso es que oimos un murmullo que parecía la salida...para nuestra desgracia, efectivamente, el grueso de la manada había echado a rodar y nosotros aún en el parking, aunque no eramos los únicos, había bastantes BIKERS que sorprendidos montaron en sus bicis(como nosotros) y emprendieron la marcha.
Nos advirtieron que los primeros 25-30 kilómetros iban a ser técnicos y duretes, y así fué, aunque el paisaje espectacular hacía minorar el esfuerzo, subidas, trialeras, más subidas, senderos descarnados, y bajadas realmente espeluznantes cumplieron el pronóstico anunciado.
Cabe mencionar que el comienzo fué algo tortuoso, con grandes filas de corredores, bajados de la bici,formando un tremendo pelotón que nos permitía en pocas fases subirnos a la bici y pedalear.
En la última bajada que era espeluznante, bajamos casi todo el tramo a pié, a buen ritmo y una vez abajo veo que Pedro y Paco no me siguen, espero unos instantes, pero nada, pasan los minutos y decido sacar el móvil de mi mochila: "Dos llamadas perdidas", devuelvo la llamada y ya teníamos un problema, Paco había sufrido una caida y como producto de ella, su cadena se había hecho unos nudos "marineros" que no había forma de quitarlos, sigo esperando y al final decido continuar la marcha a un ritmo flojo para que en algún momento puedan engancharme. Al final ruedo como una hora en solitario y vuelvo a hacer una parada, en ese instante ya estamos próximos y en unos metros volvemos a engancharnos.
El desarrollo de la etapa iba permitiéndote algunos tramos para rodar más fuerte, pero en ningún momento dejó de ser la clásica "rompepiernas" con tramos largos de ascensos, y mucha, mucha piedra suelta por todos los caminos que discurrian por la subida.
Después de tomar un aperitivo en los avituallamientos (que me gustaron mucho)seguimos el ritmo y a la altura de "La Cabrera" decidimos estirar un poco porque Peter venía notando algún extraño en sus piernas.
A partir de aquí,estabamos preparados para tomar con ganas la última subida fuerte, cuando noté que el músculo de mi pierna izquierda se iba montando, y al parar me dió un soberano tirón en mi abductor que me hizo tirarme literalmente a estirar hasta que pude contener las molestias. Vuelta a la carga por unos senderos maravillosos, de verdad que por ganas y fuerzas no ibamos a escatimar esta mañana pero el infortunio (habiéndo pasado tres controles) se cebaba nuevamente con nosotros. Cuendo estabamos en la base del kilómetro 50, la organización nos comentaba que iban a retirarse del recorrido y que corría por nuestra cuenta el seguir la marcha, eso sí jugándonos el último tramo porque no llevábamos el track del recorrido cargado en nuestro GPS.
En fin, entre eso,el tiempo perdido y los tirones musculares que muy probablemente volverían a aparecer en este último tramo exigente, decidimos salir por carretera hasta El Berrueco y dar por finalizada la MARCHA.
Final de etapa a las 13.30 horas con una sensación muy buena, por haber disfrutado de una marcha llena de detalles, de bonitos paisajes (qué sierra más maravillosa tenemos los madrileños)y sobre todo por haber rodado con el ánimo y las consignas con las que arrancamos: "Correr en grupo, disfrutar de los momentos buenos y (que pena) de los malos juntos", pero así fué señores esta mañana de Domingo donde podriamos escribir muchas más lineas de cosas y cosas, pero esos detalles ya los comentaremos en nuestra próxima quedada.
Felicitar a mis dos compañeros de viaje, por madrugar una mañana y compartir esta MARATÓN SIERRA NORTE. (Seguro que habrá más)
Un abrazo lunáticos
Video de la prueba.