lunes, 27 de enero de 2014

Ruta por "Los Cortados de Rivas" en la inmensidad de la niebla

Grupeta en el mirador de Rivas

Rafa con su uniformidad Lunática...
Por fín tenemos foto con la flamante GIANT de Nacho.
Nissar se apuntó a esta etapa de Los Cortados y quedó encantado!!!!
Paco en la subida del Cristo de Rivas, primera subidita de la mañana.
Miguel también quiso conocer la ruta y no se perdió la cita
La niebla no dejó ver las Lagunas en el recorrido, pero tenerlas por debajo, marcaron un paisaje muy especial.


Descansito en el Pinar pasada la Carretera de Valencia.

Rafa en la inmensidad del día....

lunes, 20 de enero de 2014

II Edición Maratón de la Matanza 2014




   Crónica gentileza de nuestro "cohete" Juanmi, que hizo una carrera espectacular: Puesto 52º de la General y 25º de su categoría. Tiempo de carrera: 2 horas 40 minutos.

La verdad es que que añadir al día que vivimos ayer Rafa, Nacho y un presente. Un verdadero Infierno en el que acabas viendo el Cielo.


Una carrera como nunca antes había sufrido, con subidas de infarto, bajadas técnicas, ríos, caminos de fango y sobre todo granito, enormes piedras de granito que si subiendo se hacían difíciles, bajando ni te cuento.

Yo salí con los de delante siempre me gusta salir de los primeros para evitar las típicas caídas de la salida, tras recorrer 200 m, una pared vertical de granito se postra delante de nuestras vistas, así que no queda otra que subir...5 Km. de autentica agonía con un porcentaje medio del 16% y para colmo nevado.

Al coronar PUFF! Se me sube el gemelo derecho (¡Creo que se me acabo la carrera para mí!) me bajo de la bici y estiro un poco y consigo recuperarme, he perdido 5 minutos cruciales pero son cosas que pasa.

Después vienen una serie de bajadas muy técnicas en la que no te puedes despistar ni un solo minuto (en la que veo por lo menos unas 15 caídas aunque ninguna de importancia) en el Km. 16 cruzamos el primer riachuelo, el agua hasta la rodilla (en ese momento dejo de sentir los dedos de los pies hasta después de la ducha al acabar la carrera) ahí cojo a dos miembros del club colmenar viejo, que los habíamos conocido en la salida y voy con ellos toda la carrera.

Siguen las subidas y bajadas continuas (Ni un solo descanso) con frió, nieve, barro, agua y piedras muchas piedras los 2 avituallamientos los miro de pasada nadie quiere perder ni un minuto.

Y cuando las fuerzas empiezan ya a flaquear allá por el kilómetro 30 comienza la larga y tenue subida hasta la meta en Cabanillas de la Sierra, 10 Kilómetros de autentico sufrimiento que tienen su recompensa a la llegada al pueblo con el calor de la gente animando, con el paisaje de la sierra nevada al fondo y esas patatitas con costillas al finalizar ¡que entran como Dios!

Finalizo en 2 horas 42 minutos (el 25 de mi categoría Master 30) y con ganas de correr la próxima edición.

Lo que no quiero dejar escapar es mi mas sincera felicitación a la Organización que para mí estuvo de 10, y a toda aquella gente que a pesar de las inclemencias meteologicas no dejo de animar ni un solo minuto.















A continuación os dejo crónica de la prueba gentileza de Rafa:

7:30 de la mañana

Nos reunimos Juanmi, Nacho y un servidor en el garaje, preguntándonos si realmente estábamos bien de la cabeza. En el parte del tiempo se preveían nevadas y en casa estaba lloviendo. La verdad no pintaba bien. Nos armamos de valor, cargamos las bicis y vamos a la churre (las buenas costumbres nunca hay que perderlas, llueva o nieve.

8:15,

Sigue lloviendo y el termómetro del coche marca 2 – 3 grados. Fijo que en la sierra nieva. Nos cruzamos en la A-1 con algún que otro coche cargado con bicis, que seguro van como nosotros a Valdemanco. (Hay que estar muy loco para salir a sierra un día como hoy si no es para una carrera)

9:00

¡Milagro! Llegamos a Valdemanco y ¡¡¡hace sol!!! El termómetro marca 0ºC justo cuando estamos aparcando pero nos anima ver el sol y un día despejado. Toda la sierra está nevada (preciosa).

Van llegando otros bikers mientras recogemos dorsales (este año no hubo numero 001 para mi), preparando las bicis, etc

10.00

Con media hora todavía para la salida, el cielo se cierra, se pone todo feo y empiezan a caer los primeros copos. Todos empezamos a sacar chubasqueros y demás pertrechos para lo que se nos viene encima.

10.30

¡Salimos! Con puntualidad británica se da la salida. Este año somos 300 (el año pasado fuimos 200) con lo que se ve más bullicio y todos vamos muy apretados. La dirección de carrera nos avisa antes de salir… “Cuidado en el pueblo… esta todo muy mojado, esta nevando, etc” Pero siempre hay ansiosos. Nada más darse la salida, como a 50 metros de empezar uno que viene por detrás de nosotros se mete un guarrazo de impresión. Sólo a él se le ocurre subirse a la acera (de piedra y muy mojada) para intentar adelantar. Acaba en el suelo y chocando contra un bordillo. No tiene buena pinta el golpe. Todo el “pelotón” comenta lo absurdo de la situación.

El perfil es muy muy duro los primeros 2 km. El grupo se estira y cada uno va a su ritmo. Juanmi al ritmo del “hiperespacio”. Nacho y yo vamos juntos al ritmo del “hiperdespacio” :D La verdad es que no subimos a mal ritmo, pero comparado con algunos máquinas que nos van pasando parece que vayamos parados. Por suerte este año no hay hielo, sólo hay agua… y mucha. Pero esto es algo que se va a convertir en una costante a lo largo de la carrera.

Pasados los 2 primeros km, cogemos la pista ancha que sube al Medio Celemín. La pendiente baja algo y podemos y algo más alegres. Aquí ya hay mucha nieve y sólo hay un caminito marcado, a si que se impone la prudencia.

Nacho y yo llegamos a la cima del medio Celemín, yo con mejores sensaciones que el año pasado. A Juanmi hace tiempo que le perdimos la pista. Comienza una bajada de vértigo, prácticamente endurera con muuuucho barro y tramos que pareces que vas por ríos, con un palmo de agua. Como siempre en estas situaciones, desconecté el modo “padreresponsableconhijosymujer” y conecté el modo “oficinistaquemadoqueselevalapinzaelfindesemana”. Creo que aquí recuperamos algo de tiempo. Pasamos a algunos más “prudentes” que nosotros ...

Llegamos al pueblo y nos quedaba un ultimo tramo de bajda técnica y complicada entrando en un puente que el año pasado llevaba mucho agua. Me voy preparando mentalmente para ese río y cuando llego me encuentro que este año lleva mucha más agua (pero mucha) Imposible pasar montado. Toca mojarse.

Miro el GPS y veo que hemos hecho 10 km en 1 hora ohhh!!!! Bueno, ya sabíamos como era esto (me digo). Nacho y yo seguimos juntitos y vamos pasando barro, ríos, pechugones, ríos, lanchares, ríos, trialeras, ríos y bajadas en plan toboganes de barro (ah!, y algún que otro río)
Justo antes del avituallamiento hay una bajada complicada y uno de los participantes se rompío un brazo (jur! )
Nacho y yo paramos solo 3-4 minutos para recuperar el aire, tomar unos geles y poco más. Adelantamos a mucha gente aquí que estaba parada comentando lo duro de la ruta.

De aquí al siguiente avituallamiento, todo es terreno rompepiernas con muchísimo barro y cruzar ríos y mas ríos. En uno, Nacho y yo decidimos portear para vadear. No fue muy buena idea, nos acabamos mojando igual : Eso sí, el que pasaba, si o sí, metía hasta la rodilla en el agua.

Por suerte este año, la organización decidió quitar el pechugón absurdo que había el año pasado antes del avituallamiento con lo que llegamos más enteros a disfrutar de un caldo calentito y buenísimo junto con unos bocatas de panceta o lomo. Además de turrón, fruta, gominolas y hasta manguera para lavar la bici, cosa que aunque perdieras tiempo, era casi obligatorio hacer del barro que traían las pobres.

Estuvimos parados unos 10-15 minutos y salimos con ánimo renovado… sabiendo que hasta meta “solo” nos quedaba subir y subir. Poco a poco los kilómetros fueron pasando y fuimos dejando atrás a algunos bikers, cosa que siempre anima. Todos, nosotros y a los que adelantábamos, llevábamos en la cara un rictus de sufrimiento y de “que poco me queda en las piernas”. Esta parte de la carrera es muy dura, y si le sumas la cantidad de barro que había era demoledora.

Nos plantamos a 5 km de meta ya muy tocados, y al subir lanchar de la Condesa (creo que se llama así) a mi me da el primer aviso el cuadriceps. A Nacho se lo da el gemelo. Con mucho miedo y pocas fuerzas vamos dosificando y cada vez haciendo más tramos a pie.

Finalmente nos plantamos a la entrada del pueblo y allí estaba Juanmi esperando, para hacer los videos de rigor, donde dejamos grabado lo mucho que nos acordamos de Carlos ¡!!

Entramos en meta con un tiempo de 4h 23 min. Que aunque es alto, para mi finalizar una prueba como esta es un orgullo. Lo de menos es la clasificación, los hubo mucho más rápidos y los hubo mas lentos que nosotros. Lo importante en una prueba de esta dureza es disfrutarla, y así lo hicimos.

De remate, la organización nos había preparado un plato muy generoso de patatas con costillas que nos hizo recuperar el calor.
Ya estamos descontando los días para la edición del año que viene

Saludos cordiales,

Rafa

P.D. Añadir, que Rafa se graduó como Lunático pleno al estrenar equipación personalizada con los colores del Club. Enhorabuena campeones



En verde el trazado de la Matanza, en rojo el inicial de la Organización, el azul corresponde al de la Maraton Sierra Norte